SOMOS LO QUE PENSAMOS. (La vida es Bella)
A veces cuando recuerdo los tiempos vividos, como todo lo que es simple, porque la vida es simple, nuestro dolor no viene de las cosas vividas, sino y fundamentalmente, nuestro dolor viene de aquellas cosas que fueron soñadas y no se cumplieron.
A veces sufrimos tanto por amor, sin pensar que lo correcto sería que la gente no sufra, agradeciera tener o haber tenido la posibilidad de conocer una persona, linda agradable, que fuera generosa con nosotros y si sintió sentimientos intensos y nos hizo compañía por un tiempo razonable, recordarla con felicidad, aunque ya no este a nuestro lado por la causa que fuere.
Pero el hombre parece que nació para sufrir, por que?, porque tenemos la facilidad de olvidarnos rápidamente de lo disfrutado, de las metas conseguidas, y comenzamos a sufrir y a penar, por nuestras ilusiones irrealizadas, por todo aquello que debimos dejar en el camino y nos hubiera gustado conocer a lado de nuestro amor, al lado de nuestros hijos, que a lo mejor no tuvimos o que se nos fueron de nuestras manos sin que nos diéramos cuenta.
Sufrimos porque a veces nuestro trabajo es desgastante y se nos paga poco, y no pensamos en todas las horas libres que dejamos de tener para ir al cine, para conversar con un amigo, para hacer lo que nos gusta, para dar amor o servir al prójimo.
El hombre parece que nació para sufrir tal vez porque todos los momentos que podríamos estar confidenciando con nuestra madre, nuestras mas profundas angustias, y ella nos estuviera esperando que lo confesáramos, nosotros no lo hicimos, sufrimos a veces, no porque nuestro equipo de fútbol perdió sino porque perdimos la euforia. A
A veces incluso sufrimos no porque envejecemos, sino porque el futuro nos esta siendo confiscado, sobre todo en aquellos países que no te dan una salida adecuada para vivir como soñaste, y pensas que nunca vas a poder tener.
Por eso pensando en ayudar a los hombres, me dije el un día, como aliviar el dolor de lo que no fue vivido, y no es difícil, es fácil, como pensador, mire al cielo, medite, di gracias de estar vivo, y desde ese momento cada día me convenzo mas y mas, que debo vivir la vida. Soy un convencido que no se puede perder el tiempo, que el desperdicio de la vida esta en el amor que no damos, en la fuerza que no usamos, en la prudencia egoísta que nada arriesga y en tanto esquivar el sufrimiento que a lo mejor nunca vamos a tener.
Por eso amigos, no pensemos tanto en ese futuro que no existe. Solo proyectemos el nuestro y saquémonos de encima los miedos que nos hacer perder la felicidad que podríamos estar gozando.
El dolor, en la vida es inevitable, pero el sufrimiento es opcional, lo mismo que la felicidad dejemos de sufrir y vivamos la vida, cada día como un nuevo amanecer, porque la vida, amigos, insisto es un pensamiento que solo nosotros podemos llevar a la realidad.
Y ese pensamiento debe concentrarse en disfrutar de la mejor manera el presente, que es lo único que existe, sin olvidarnos del pasado, que es solo experiencia, aceptando los consejos, que es experiencia adquirida como el estudio y fijándonos metas reales y que podamos cumplir y vivamos cada día plenamente, pensando solo en ello. Con amor, tolerancia y comprensión, porque asi, les aseguro, No solo alcanzaran todos sus sueños, sino que al final del camino podrán decir. Que bella es la vida.
Un Cuento de Jordi.